No ha vivido en la calle, se le nota por lo mansurrón que es, pero sí ha terminado en la calle por alguna razón. El caso es que, al no estar acostumbrado a ver otros animales, lo más probable es que se haya peleado con otros gatos callejeros, a juzgar por como trajo las orejas. Hubo que bañarlo, desparasitarlo y curarlo. Debió haber vivido entre cuatro paredes en una casa o piso aislado sin contacto con otros gatos, pues al llegar a casa y ver otros de su especie... enseguida se puso a la defensiva, de hecho aún sigue así después de llevar en casa unos dos meses. Se lleva mal con los machos, las hembras y los gatitos pequeños, pero poco a poco se va suavizando y hasta le vemos comer con todos. Le ha gustado su nueva casa y la libertad que ahora tiene en un lugar donde se le mima.
Cuando me lo dijeron, enseguida lo quise y al día siguiente ya lo tenía en casa, pues llevaba tiempo queriendo un gato blanco, preferiblemente, proveniente de alguna protectora o similar.
Qué bien para todos, estará encantado...y a ver si cunde tu ejemplo, por desgracia no es habitual
ResponderEliminarNo lo es, no, la gente no quiere cargos y la mayoría son reacios a tener mascotas, o se conforman con uno solo animal.
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